
Lecturas
Unificando Conceptos
Por Juan Agustín
_ ¿Qué es el Ser Humano?
¿Te
lo has preguntado? Su capacidad de OBSERVAR (procesar, recibir, transformar,
transmitir, filtrar la información) es única. De tomar decisiones,
de tomar consciencia. De ver, entender, y en base a eso, actuar. Así
crear. Hacerse más libre o más preso. Más dependiente, independiente o inter-dependiente. Aceptar o
negar. Simplemente Ser. O resistirse a la vida, a la naturaleza, al
cambio.
La Madre Tierra manda una orden: "tod@s a evolucionar" dice. Las plantas la reciben, actúan. Los animales la reciben, actúan. Los árboles, las montañas, los mares.. la reciben, actúan.. y el humano? L@s Human@s? Tod@s la reciben, no todxs la escuchan. Algunxs la escuchan, no tod@s la efectúan. Algunxs son consecuentes con este llamado, no tod@s continúan aprendiendo. Es@s poc@s, hacen el cambio. Hacemos el cambio.
¿Tanto miedo da el cambio? ¿Por qué se transforma en un proceso de puras resistencias, en vez de un proceso de puro aprendizaje, de humildad, de amor y motivación..?
De aceptar nuestras trabas, nuestras trampas, sólo para cambiarlas. Para soltarlas. Para ser libres. Verdaderamente libres.
El libre albedrío no existe a menos que te despojes de ellas. Mientras tanto seguirás siendo preso. Presa o preso. De tus creencias limitantes, de tus miedos, de tus prejuicios, de tus ideas e ideales. Presa de tu predador: vos mismo, vos misma. Tu oscuridad. Tu legado negado. Tu no-amor.
Felices quienes se atreven a ver y soltar, sin caer en el victimismo de aferrarse a su auto-compasión, en el "no puedo", "no sirvo", "no me sale", etc.
SÍ puedes, SÍ sirves y SÍ te sale. Te sale como te sale. Y si no es como querías que te salga, ¡a practicar, pues! No existe mayor equivocación que el aferrarse a un auto-concepto limitante. Ese es el verdadero y único error: ser presas de nuestra propia trampa.
Ser presos de nuestro propio condicionamiento.
Del des-conocimiento.
Ama a tu cuerpo, ama a tu alma. Ama tus pensamientos, tus sentimientos y tus palabras. Pues eso es lo que eres.
¿Te has preguntado qué eres? ¿Qué es lo que realmente deseas ser? ¿En qué te has convertido? ¿Si todas estas palabras van en la misma dirección o si hablamos una cosa, hacemos otra, y pensamos y sentimos otras diferentes?
¿Quién eres? ¿Te escuchas? ¿Te atiendes? ¿Te amas? ¿Te respetas?
Piensa por un momento en una persona a la que amas mucho, a la que respetes, a la que cuides. Una persona a la que le digas (quizás no con palabras, quizás con gestos, acciones o con el pensamiento): "Deseo lo mejor para tí". Estamos hablando de un/a hijo o hija, un/a amante, un/a sobrino/a, nieta/o, hermana/o, madre, padre, amig@, animalito, etc..
Bien, focaliza ese amor. Focaliza toda esa atención ¿Qué sientes? ¿Cuánto amor es? ¿Cuánto amor y dedicación aplicas? ¿Cuánta atención? ¿Cuánto respeto y cuidado?
Y ahora... vuélcala hacia ti. Cambia esa imagen de aquella persona y vete a ti ¿Qué piensas? ¿Qué sientes? ¿Qué te viene a la mente? ¿Qué parte del cuerpo te duele, te molesta? ¿Te respetas? ¿Te quieres? ¿Te amas? ¿Te cuidas?
Ese lugar donde ahora sientes molestia, bloqueo, dolor... ¡ámate! Apóyate las manos y dite que te amas! Que te respetas, que te pides perdón y te perdonas. No hay nada más que hacer que perdonarse, respetarse, amarse y seguir. Solo así conseguimos la fuerza que la Madre Tierra y todo el Universo, todo dios, todo lo que es, desea para nosotr@s. Ése es el cambio que desea para nosotr@s.
Que nos aceptemos con humildad, que seamos el cambio. Humildad no de carencia ni de pobreza, sino humildad de arrogancia, humildad de soberbia, de creerse más o mejor. Todos somos. Simplemente somos. Y ya. Eso es suficiente. Para amarnos, para aceptarnos y respetarnos. Y desde allí, verás, veremos, como el mundo cambiará. Cómo cambiará toda la realidad. Cómo cambiará todo lo que somos, y todo lo que creemos que somos. Todo en lo que creemos que este mundo, este país, esta ciudad.. se ha convertido. Porque l@s que la convertimos, somos nosotr@s. Nadie más.
¡Ama, ama, ama, y ensancha el Alma!
_ Nuestro legado en la Tierra
La luz, una fuerza que va más allá de nuestras lmitaciones. Sean mentales, físicas o emocionales.Un conocimiento hecho sabiduría que va más allá de lo que se pueda leer en cualquier libro.
Ser guardianes y guardianas. Ser cuidadorxs, protectorxs y amadorxs de esta Madre Tierra. Ser la llave que abre y accede a su información. Que la brinda y la custodia.
Ser quienes recordamos que fuimos y seremos. La sabiduría de las estrellas, en nuestro cuerpo.
La Naturaleza es Vida y Todo está conectado en ella.
Cada ser es único, irrepetible, irreemplazable. Y su información es especifica y su experiencia es fundamental para la existencia.
Un movimiento o transformación en lo particular afectará al todo. Por más "mínimo" o "máximo" que sea. Percibir los cambios tiene que ver con los niveles de sensibilidad.
La sensibilidad perceptual esta ligada a los "filtros" y a nuestros niveles de consciencia.
Los "filtros" son nuestros juicios, basados en nuestros sistemas de creencias.
Los filtros y los juicios, que generan una forma de pensar, de calificar lo que está bien y lo que está mal, es decir, nuestra moral, son muy distintos de la amoralidad y el estado de neutralidad. Y son los que generan la realidad ilusoria y condicionante en donde perdemos el poder interno, así como nuestra responsabilidad y nuestra libertad.
El estado de equilibrio es la justa medida de Yin y Yang PARA CADA COSA.
Todos los procesos fueron necesarios para llegar al aquí y ahora. Nada sobra ni nada falta, nada está de más ni carece de sentido en la existencia. Quizás aún no se ha entendido o no ha sido sincronizado con su propósito. Eso no quiere decir que no tenga un propósito para el cual fue creado. Para el cual EXISTE.
Tu responsabilidad y capacidad máxima de transformación y auto-realización (ILUMINACIÓN) siempre está en el momento presente, ya que para Dios (ese gran sistema viviente que abarca cada estrella, incluyéndonos), es el único momento que existe.
TODO es un mientras tanto.
Viajar en el tiempo y modificarlo solo es un estado de Consciencia, una capacidad de la mente.
EL PODER Y PLENITUD MÁXIMO SOLO SE ALCANZA EN EL PRESENTE.
_ Principio de Coherencia
Cuando hablamos de Principio de Coherencia, podríamos hablar también de Principio de acción válido, acuñando un término de la filosofía humanista del argentino Mario Rodriguez, más conocido como Silo. Creador de esta corriente de pensamiento y forma de vida. Si bien no "pertenezco" a dicha corriente, sí lo soy desde el sentido natural de la expresión. Y verdaderamente, este PRINCIPIO es fundamental para un buen-accionar.
Se trata de pensar, sentir, actuar y decir en la misma dirección. es decir, en coherencia. No fragmentad@s, no a medias, no hacia un lado y hacia otro. Sino en un mismo sentido. En unidad.
Muchas veces sentimos algo, pero creemos otra cosa. Percibimos una cosa pero vemos otra. Pensamos algo y actuamos en otra dirección. O accionamos sin ser consecuentes con lo que decimos.
Todo esto es para observar. Para revisar. No se trata de castigarnos, juzgarnos o condenarnos. Sino más bien observarnos, sincera y honestamente.. sin miedos, atreviéndonos a percibir que hay allí. Detectar las Incoherencias, el sostenimiento de patrones de comportamiento que han quedado obsoletos, las ideas que nos programan y condicionan, el miedo que le tenemos a la libertad, a ser nosotr@s mism@s, a ser responsables de lo que hacemos y decimos y ganar poder por ello. No lo sabemos, y es hora de experimentarlo. Dejar de delegar el Poder Personal y tomarlo todo. Con sus pro y contras, para hacer algo fructifero con ello y que aporte belleza a esta vida.
_ Movimiento cierto
Comenzamos con este título porque las palabras esconden información, la codifican. ¿Cuál info? Toda la que se ve y la que no se ve, la de nuestros cuerpos, la de las cosas, la de los pensamientos, las maneras de sentir, etc.
Muchas palabras terminan con el sufijo "/miento", escondiendo quién sabe qué. Y como todavía es mucho para algun@s este "movi-cierto", este cambio tan radical en la manera de escribir y hablar (apenas si se tolera en algunos casos algo tan del sentido común como el "lenguaje inclusivo"). Nos remitiremos a nombrarlo mas no a utilizarlo constantemente para no desviar la atención del mensaje.
Volviendo a la palabra MOVIMIENTO: el desplazarse acertivamente de un lugar a otro. Por ejemplo, en una acción, en una decisión, en una palabra, en un hecho. Es imprescindible, para "llegar a buen puerto", entrar en un estado de equilibrio interno antes de hacerlo. Un estado de coherencia interna, de armonía. Observar desde dónde lo hago y qué quiero lograr/obtener realmente, es decir, a dónde quiero llegar. Ningún sentido tiene mentirse en este punto. De hecho, no sé si tiene sentido siquiera en algún punto..
En cuestión: desde dónde inicio el movimiento, es decir, "cómo estoy" cuando acciono (si lo hago desde la dicha o desde el miedo, desde la desesperación, tirando manotazos de ahogado, desde la comprensión o la apatía, desde la individualidad o desde la consciencia de unidad); es lo que va a codificar el resultado de dicha acción. En otras palabras "me lo llevaré conmigo". Es decir, traerá los aprendizajes competentes a esa experiencia que trae esa información.
Lo mismo sucede cuando quiero cambiar algo externo pero no me di cuenta que eso no cambiará hasta que cambie yo: cambiamos de trabajo, de pareja, de casa, de país.. y, sí, es posible que ese cambio me ayude a "refrescar" mi punto de observación de la experiencia. Pero lo que deba aprender, me lo llevaré conmigo a todos lados. Es por eso que tendemos a repetir situaciones afectivas-relacionales, tratos con jefes, hábitos cotidianos en casas nuevas, etc.
Cuando hacemos un gesto por alguien.. ¿lo estamos haciendo por ell@s? ¿lo estamos haciendo por nosotr@s? ¿lo estamos haciendo por la unidad, por el bien mayor o como se quiera llamar? Es indispensable en este punto hacerse estas preguntas hasta que la coherencia sea un hábito más si se quiere TODO: la salud, la abundancia, la belleza, la paz, el amor. Todo esto, va de la mano de la Verdad.
Y que respetándonos los tiempos, sin apresurarse pero sin colgarse demasiado, y siempre, siendo coherentes y sincer@s, nos atrevamos a revisarnos, esas sombras que habitan en nosotr@s y nuestra gente hace tanto tiempo. es hora de liberarlas para liberarnos.
Drenarnos de emociones tóxicas, egocentrismos, apegos excesivos, idealizaciones, expectativas ilusorias, aprender a soltar todo esto para crear emociones armónicas y empáticas, sin miedo a sentir. Desarrollar un sentido de pertenencia en la vida misma y no solo en un equipo de fútbol, partido político, ideología o religión. Un apego sano a la vida, desde el valor y sin miedo a la muerte, con notr@s mism@s, nuestras cosas y nuestra gente, que a la vez no son de nadie más que de la vida misma.
Aceptar las cosas como son para vivirlas plenamente, si vemos lo que no nos gusta podemos cambiarlo. Si no tomamos esa responsabilidad sincera, no podemos hacer nada, y perdemos el poder. Aceptando la crudeza y la belleza de la vida. Que trae placer y trae dolor. Que trae nacimiento y trae muerte. Que trae lo perecedero en lo infinito y lo eterno en un instante. Que trae transformación y cambio.
Aquí una sugerencia de lectura para observarnos desde dónde actuamos: Los 4 Acuerdos Toltecas, de Miguel Ruiz.
¡A su salud!